VIERNES, 24 DE SEPTIEMBRE

 

Te doy gracias Padre, porque me has dado compañeros y amigos, cada uno de ellos es un regalo para mí.


Dame tu mirada para contemplarlos, tus manos para ayudarles, tu sonrisa para divertirlos, tu inteligencia para enseñarles y sobre todo Padre dame tu corazón, sí, tu enorme corazón, para no dejar nunca de amarlos.

Amén